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Después de enamorarme descubrí que el amor
es tan solo una invención,
una creencia más bien;
un estado mental que nos altera,
que nos cambia pero que nos llena.
Después de tanto sufrir,
después de tanto en vano soñar,
mi gastado corazón la logró olvidar.
Entonces descubrí la falsedad
de ese sentimiento que simplemente es atracción;
atracción entre dos personas,
o de una persona hacia otra,
que es lo más común e ingratificante.
Una simple atracción,
acompañada de un teatro mental
cuyos personajes sólo son felices en sueños,
en sueños que luego se desvanecen
como se desvanece la luna tras la noche.

Y quisieras ser tan alto como la luna
para tocarla y sentirla como tuya,
para saciar esa sed que te inunda,
para curar esa espina que sin querer te clavó
que se llama amor,
y que es la esperanza de estar junto a ella,
la esperanza de ser feliz junto a ella.
Y así pasan los días, las noches,
soñando ni más ni menos con alcanzar
esa luna tan resplandeciente y hermosa.
Hasta que estés a punto de estallar.
Cuando quieras dejar de soñar
y que tus sueños se hagan realidad
quizás dos cosas podrán pasar:
o es demasiado tarde ya,
y la has dejado escapar;
o saltarás desde el acantilado al mar
y en el mar te ahogarás.
Intenta no ahogarte,
lucha por salvarte,
o no hagas nada, ¿para qué?
Siente como se inundan tus pulmones,
siente como tu corazón se estremece;
pero no se arrepiente.
Hizo lo que tuvo que hacer,
intentar conseguir ese sueño,
clavar un puñal en su pecho,
a ver si alivia ese dolor tan intenso.
Deja que el tiempo pase,
pues el tempo lo cura todo, eso dicen.
Un poco de distancia,
anular las esperanzas
que queden todavía ancladas
y a intentar seguir adelante.

Quieras o no quieras,
en el amor creas o no creas,
necesitarás una persona
que calme tu soledad,
ese vacío tan inmenso que se siente
si no tienes nadie a quien querer,
y si no tienes nadie que te quiera.
Sufres si hay amor,
sufres si se perdió el amor,
sufres aunque no creas en el amor,
sufres si no es correspondido el amor,
sufres si no encuentras el amor...
Creado o no en la mente, es una putada.
El suicidio nunca es la solución,
pues la supervivencia es la cuestión.

Un abrazo gente, y perdonad por la longitud, Fets.